La U.E. ha pensado en
3 posibilidades para etiquetar la carne de
cerdo, y también la de
aves y ovino:
- Etiquetado en el que se diga si la carne ha sido criada o no en la U.E en los últimos 4 meses
- Etiquetado en el que conste el país de cría y de sacrficio
- Etiquetado en el que además de lo segundo, conste también el país de nacimiento
En España, las principales instituciones que trabajan en el mundo porcino parecen decantarse por la primera opción, o sea, que se especifique si la carne es carne U.E o no. Y lo justifican porque así los productos porcinos europeos tendrán más capacidad de competir con los productos extracomunitarios.
Además,la primera propuesta no tendrá coste alguno, pero la segunda aumentaría los costes un 1,3 por 100, y la tercera un 2,5 por 100, según indica un estudio manejado por la Unión Europea
A pesar de la opinión española, en Europa parece que se prefiere que se indique el país de nacimiento,
cría y sacrificio del
cerdo, cuestión que desde muchos sectores se considera que sólo aumentará los trámites y el coste en el tema del etiquetado de los cerdos